Como Curar el Torticolis (cuello torcido) No siendo muy pronunciada la dolencia, es suficiente con un enérgico masaje. Friccione el cuello con azufre de barra y aplíquese después una franela caliente. Si el dolor fuera persistente, no obstante la aplicación, una cataplasma laudanizada y bien caliente procurará un alivio considerable.
El Migajón de Pan. El migajón de pan fresco es eficaz para eliminar las manchas de grasa de las alfombras, siempre y cuando no hayan penetrado mucho en el tejido. Después de que el migajón haya absorbido la suciedad, se cepilla o barre la alfombra a fondo. También constituye la miga de pan un excelente recurso para limpiar los tapices en general, así como para avivar sus tonos. en todos los casos, esta operación debe hacerse por pequeñas zonas.
Blusas de Seda. Las blusas de seda deben de plancharse con suma delicadeza, en especial cuando son blancas. Si se planchan al derecho, ha de cubrírseles con un paño que evite posibles manchas. Pero es siempre preferible plancharlas al revés, lo cual hace innecesarias las otras precauciones y de paso no desmerecen su aspecto.
Como Conservar las Pieles. Para conservar abrigos o adornos de piel en general (cinturones, etc.) se ponen en una bolsa de material plástico o de celofán herméticamente cerrada, colocar dentro una tableta de naftalina o cualquier otro producto que mantenga alejadas a las polillas, así se alargará la duración de las pieles.
Diamantes. Para limpiarlos se lavan con agua de jabón muy espumosa y se cepillan después delicadamente, aunque el cepillo debe de ser duro; teniendo cuidado de no dañar los engarces, cuyo resultado será la pérdida de las piedras. Una vez limpio el diamante, se enjuaga con agua caliente para quitarle todo residuo grasiento y de jabón. Se mete en alcohol de 90 grados. Si la montura es firme y segura, lávese en agua tibia y jabonosa por medio de un paño de algodón o lana. Después con un palillo de dientes envuelto en la misma tela, se eliminan los puntos negros de suciedad que hayan en la montadura, bajo la piedra. Estando muy sucios los diamantes, se agrega al agua jabonosa de la receta anterior un poco de bórax en polvo y también amoniaco líquido. Frótese con un cepillo suave por debajo del diamante, déjese sumergido durante media hora en espuma de jabón, escúrrase y séquese con aserrín, quítele el que se haya pegado con un cepillo suave. En lugar de espuma de jabón se puede usar alcohol en el que se tendrá el diamante por una hora. Límpiese con un trocito de esponja, empapada de amoniaco y atada a la punta de un palillo. Frótese con piel de guante, cepíllese con agua de colonia. Métase en una bolsita don salvado o aserrín y agítese durante un buen rato. El brillo que se adquiere es incomparable.
Tratamiento Corporal. El ajonjolí (sésamo) y el descascaramiento corporal marino como coadyuvantes de la belleza. En un recipiente mezcle medio litro de aceite de ajonjolí con media taza de sal marina o sal pulverizada. Póngase de pie y dése una ducha por cinco minutos (su cuerpo debe de estar recién bañado, para suavizar la piel) cierre la regadera y tome puñados de aceite y de sal y frótelos con firmeza pero con suavidad en todo su cuerpo. La sal marina es un abrasivo fuerte, de modo que tenga cuidado. Lo único que quiere remover son las células muertas. Frótese un poco más fuerte en los codos, rodillas, talones y pies, para la espalda use un cepillo remojado en la mezcla. Después del tratamiento observará que su cuerpo adquiere un tono rosado maravilloso, se verá más juvenil. Su cuerpo está recibiendo los mismos beneficios que su cara cuando le da tratamiento. Cuando termine el proceso enjuáguese con agua tibia, séquese bien con una toalla grande y afelpada y frótese todo su cuerpo con aceite de ajonjolí.
Cuidado Diario. Para la piel de su cuerpo y para que no gaste tanto dinero en cremas, hay que usar lo siguiente: Todos los días después de bañarse dése un masaje corporal con una pequeña cantidad de aceite de ajonjolí. Hacerlo vigorosamente para que la sangre acuda a la superficie, excluya los pechos. Como el ajonjolí es un aceite vegetal natural penetra en unos cuantos momentos, de modo que no manchará la ropa y sí conservará su piel suave y protegida durante todo el día. Agregue unas cuantas gotitas de su perfume favorito al aceite, éste es un método efectivo para retener la fragancia durante todo el día. Su consejera favorita.